domingo, 19 de junio de 2011

Justo ahí

Entre pecho y espalda galopa ansiosa sangre ardiente
al calor del  horizonte rojo que hay en su mirada
en los acordes prohibidos que abanica el viento
en el roce negro de su pelo sobre la piel descalza 
la humedad tersa de sus labios saben a gloria
las arenas del tiempo guardan su olor en secreto.




4 comentarios:

  1. "Ardiente", "prohibido", "rojo", "roce", "humedad", "olor". Cada uno de los versos se encargan de mantener la sensualidad creada con términos como aquéllos.
    Un poema estimulantemente erótico que si lo sumamos a las altas temperaturas que hacen por aquí por Alicante sucede lo que sucede. El deseo desbocado, jajajaja...

    Un saludo, encanto.

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  2. jajaja aun en estas temperaturas bajas sucede!
    Saludos!! ;)

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  3. Interesantes textos los tuyos...
    Saludos.

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  4. y "Eva. Ella era Eva. Pero él no Adán. Sin embargo la miró como a la primera, como a la única mujer del mundo." me encantó.

    Saludos Leo.

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